orfirio Díaz, un hombre cercano a los 80
años, durante una entrevista concedida al periodista norteamericano James
Creelman en 1908, declaro que no volvería a postularse a la
presidencia de la república mexicana para 1910 y por lo tanto, el pueblo
tendría la libertad de elegir democráticamente a su próximo gobernante. Como
resultado, surgieron clubes y organizaciones como el Partido Democrático en
1908 y el Centro Antirreleccionista en 1909.
Entonces, Francisco I. Madero fue
lanzado como candidato por el Partido Antirreleccionista
con el objetivo de cuidar los intereses de los empresarios y hacendados
norteños. A través de giras, Madero promovió su libro “La sucesión presidencial”
alcanzando una gran fama en casi toda la
República Mexicana.
A Porfirio Díaz no le agrado el éxito de
Francisco I. Madero, entonces lo
persiguió y lo hizo prisionero en San
Luis Potosí en junio de 1910, así las
elecciones siguieron su curso y Porfirio Díaz volvió a ganar. Poco después,
Madero escapo y se refugió en San Antonio Texas, donde el 5 de octubre de 1910, con un grupo
de colaboradores redacto el Plan de San
Luis Potosí y convocó a la lucha armada para el 20 de noviembre del
mismo año.
Entre las demandas del Plan de San Luis
Potosí esta la exigencia de declarar
nulas las elecciones, desconocer al actual gobierno, regresar las tierras a los
legítimos propietarios, declarar y hacer valer el principio de NO REELECCION y
Madero ser el presidente interino hasta derrocar a Díaz para después convocar a
elecciones.
Antes de la fecha señalada por el plan, se
levantaron en armas en Chihuahua, Coahuila
Durango y otros estados, entonces Madero regreso a territorio mexicano y encabezó las fuerzas
revolucionarias. El ejército de Díaz estaba deficiente sin experiencia y práctica,
mientras que el de Madero estaba integrado por jornaleros, vaqueros, mineros,
ferrocarrileros y algunos industriales. En el centro y sur del país el ejército que lo apoyaba estaba integrado
por campesinos sin tierra y motivados por el compromiso de que algún día recuperarían
lo perdido.
Díaz creía que la rebelión seria
fácilmente derrotada, sin embargo, para marzo y abril los ejércitos
revolucionarios avanzaron a Chihuahua y en Ciudad Juárez se enfrentaron y ganaron, provocando que el
grupo porfirista se rindiera.
Mientras, en el sur Emiliano Zapata al
mando de sus fuerzas militares tomo Cuautla y Cuernavaca, Díaz imposibilitado
dejo las armas y opto por una solución política a través de la firma de los
Tratados de Ciudad Juárez el 21 de mayo de 1911.
En este tratado se aceptaba la renuncia
de Díaz y el interinato de Francisco León de la Barra, quien de manera
inmediata convocaría a elecciones. Así, en junio de 1911 Madero entró triunfal
a la Ciudad de México, para después postularse como candidato a la presidencia
acompañado de José María Pino Suarez.
Triunfantes en las elecciones, Madero ejerció
un gobierno que favoreció la libertad de prensa, mejoro el ingreso económico de
los obreros y sustituyo a trabajadores ferrocarrileros norteamericanos pero
fallo en el reparto agrario y en no remover al ejército y personal de Porfirio
Díaz.
Al no cumplir con el reparto de las tierra,
Emiliano Zapata se levantó en armas con el Plan de Ayala (mayo de 1911),
demandando “Tierra y libertad” y desconociendo a Francisco I. Madero como Jefe
de la Revolución, también Pascual Orozco
se organizó con el Plan de la Empacadora (marzo 1912) para exigir “Reforma, libertad y justicia”, mientras que
Estados Unidos intervino en contra de
Madero a través de su embajador Henry Lane Wilson quien fue apoyado por Félix
Díaz sobrino de Porfirio y Victoriano Huerta para fijar el Pacto de la
embajada el 18 de febrero de 1913.
El Pacto de la embajada se firmó durante la
“Decena Trágica”, que tuvo lugar desde el 9 de febrero de 1913 cuando Manuel
Mondragón sacó de la cárcel a Bernardo Reyes y a Félix Díaz que estaban encerrados
por estar en contra de Francisco I Madero, liberados, asaltaron varios
edificios de gobierno, entre estos el Palacio Nacional que era defendido por
Lauro Villar, quien al caer herido fue sustituido por Victoriano Huerta.
Días después, el 17 de febrero de 1913
Gustavo Madero, descubrió que Huerta
estaba aliado con Estados Unidos, y aunque lo acusó con Francisco I. Madero, éste no le creyó y
deposito toda su confianza para defender la ciudad de México.
Al día siguiente, Huerta decidió
terminar con Madero firmando el Pacto de la Embajada, entonces encarcelo a Madero y a Pino Suarez y después
les hizo firmar su renuncia a la presidencia y vicepresidencia el 19 de febrero
de 1913.
Finalmente Victoriano Huerta manda a
asesinar a Gustavo Madero y ordena
trasladar a Francisco I. Madero y Pino
Suarez a la cárcel de Lecumberri, quienes antes de llegar a su destino fueron
obligados a bajar del vehículo y asesinados a sangre fría el 22 de febrero de 1913.
Cronología de los acontecimientos:
1. 1908 Entrevista James Creelman
2. 1908 Surgimiento del Partido Democrático
3. 1909 Surgimiento del Centro Antirreleccionista
4. junio de 1910 Francisco I Madero es hecho prisionero en San Luis Potosí
5. marzo 1912 Pascual Orozco lanza el Plan de la Empacadora para exigir "Reforma, libertad y justicia"
6. mayo de 1911 Emiliano Zapata lanza el Plan de Ayala, demandando "Tierra y libertad"
7. junio d 1911 Francisco I. Madero entro triunfal a la Ciudad de México.
8. 9 al 19 de febrero de 1913 "Decena Trágica"
9. 9 de febrero de 1913 Manuel Mondragòn saca de la cárcel a Bernardo Reyes y Fèlix Dìaz.
10. 17 de febrero de 1913 Gustavo Madero descubrió que Huerta estaba aliado con Estados Unidos.
11. 18 de febrero de 1913 firma del Pacto de la Embajada por el embajador Henry Lane Wilson, Fèlix Dìaz y Victoriano Huerta
12. 20 de febrero de 1913 Francisco I Madero y Josè Marìa Pino Suarez firman su renuncia a la presidencia y vicepresidencia.
13. 22 de febrero de 1913 Francisco I Madero y Josè Marìa Pino Suarez son asesinados mientras son trasladados a la cárcel de Lecumberri.
Actividad:
Con base en la cronología elabora una linea del tiempo que grafique los acontecimientos de la primera etapa de la Revolución Mexicana. Utiliza imágenes para ilustrar el contenido.